- El progreso para descarbonizar a la industria ha sido clave, pero falta camino por recorrer.
El reto para reducir las emisiones de carbono en todos los sectores, incluido el del transporte aéreo, pone en evidencia la necesidad de contar con avances tecnológicos y una mayor disponibilidad de combustibles de aviación sostenibles (SAF, por sus siglas en inglés), que ayuden a lograr los objetivos de sostenibilidad destinados a limitar el calentamiento global. “Es ahora o nunca”, urgió el Panel Intergubernamental sobre el Cambio Climático (IPCC).
Llegar a estabilizar la temperatura del planeta requiere que las emisiones de dióxido de carbono alcancen el cero neto. Limitar el aumento de temperatura en 1.5°C requerirá tener cero emisiones netas a nivel mundial a principios de la década de 2050, indicó el órgano creado por las Naciones Unidas.
Ante esta situación, expuso la Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA), la industria de la aviación ha concretado acuerdos para la compra y producción de SAF, además de inversiones en nuevas energías, como el hidrógeno o electricidad, que ayudarán a progresar en la búsqueda de la eliminación de emisiones.
“Las dificultades para lograr #FlyNetZero no se pueden subestimar, pero el progreso que estamos viendo en toda la industria muestra que este objetivo debe lograrse, y el progreso es clave, pero el camino por recorrer será largo”, enfatizó.
Por ejemplo, en los últimos meses Airbus, uno de los actores más grandes de la industria, realizó un vuelo en el que uno de los motores de un A380 fue propulsado por SAF, mientras que Ryanair reveló sus planes de alcanzar un tercio de sus objetivos de descarbonización volando con combustibles sostenibles.
Otros operadores, como los miembros de la alianza comercial Oneworld, comprarán hasta 200 millones de galones de SAF, por año, mientras que Neste y DHL llegaron a un acuerdo para suministrar a la compañía de transporte de carga con 320 mil toneladas de este tipo de combustibles durante los próximos cinco años.
En el rubro de tecnología, Francia anunció sus planes de inversión de mil 200 millones de euros para descarbonizar la aviación, incluidos 800 millones que serán destinados para el desarrollo de un avión propulsado con hidrógeno.
Por su parte, Universal Hydrogen planea abrir una planta para la fabricación y distribución de tanques de hidrógeno para aviones en Nuevo México, Estados Unidos, mientras que Pratt &Whitney recibió un proyecto del Departamento de Energía de ese mismo país para el desarrollo de tecnología de propulsión con hidrógeno.
Con información de Forbes.