Aunque las presiones inflacionarias han encarecido los alimentos de manera inédita en los últimos 12 meses; los incrementos en el salario mínimo han contenido esta tendencia. Para marzo del 2022 un trabajador que gana el mínimo tendría que laborar 13 días para pagar sus alimentos en una zona urbana.
A marzo del 2022, la canasta básica de alimentos en zonas urbanas registró un precio de 1,975 pesos para una persona, según cifras del Coneval (Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social).
Por su parte, el salario mínimo real deflactado fue de 149.69 pesos diarios, según cifras de la Conasami (Comisión Nacional de Salarios Mínimos).
Esto significa que los trabajadores tendrían que trabajar 13 jornadas para pagar apenas su comida. Esto implica una mejora respecto de la relación en marzo del 2016; cuando se necesitaban casi 17 días de trabajo para comprar la cesta mínima de alimentos.
FUENTE: Periódico EL ECONOMISTA