Un total de 337 permisos para generación de electricidad en todas sus modalidades se encuentran en construcción o por entrar en operaciones, mismos que cuentan con una capacidad instalada de 34,453 megawatts, que equivalen a más de 35% de la capacidad instalada nacional de hoy en día. Dichas centrales en construcción han resentido la incertidumbre por los posibles cambios que ha pretendido hacer el gobierno federal en el mercado eléctrico.
Según el registro de permisos de la Comisión Reguladora de Energía (CRE) en las modalidades de permisos de la legislación actual que son exportación e importación de energía, autoabasto y producción independiente de energía (legados de la legislación de 1992), generación, cogeneración, pequeña producción y unidad de propiedad conjunta, la capacidad instalada en todos los permisos otorgados en el país asciende a 1,286 permisos pero de éstos, el 27% no ha entrado en funciones.
Estos permisos por entrar en operación o en la etapa constructiva tienen así una capacidad instalada de 34,453 megawatts, que es el 26% del total de permisos solicitados a al CRE.
Así, según el regulador, los proyectos para generación de electricidad a los que se les otorgó o reanudó un permiso tras la reforma del 2013 que se encuentran operando en el país ascienden a 931, lo que en términos de capacidad instalada ha llegado, según la base de la CRE, a 98,905 megawatts, capacidad que incluye a privados y a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) y de la cual el Centro Nacional de Control de Energía (Cenace) cuenta con casi 86,000 megawatts para sus cálculos de despacho, según lo expuesto durante los foros del Parlamento Abierto del Congreso en la Cámara de diputados.
En tanto, por entrar en operaciones hay 203 permisos cuya capacidad instalada según el regulador es de 28,078 megawatts, es decir, 21% de la registrada en permisos otorgados de la CRE.
Y en construcción quedan todavía 134 permisos con una capacidad instalada de 6,375 megawatts, o sea, 4.8% de la capacidad otorgada en permisos vigentes hasta hoy.
Pero además, en términos económicos según el cálculo del regulador por el valor presente neto de las plantas en operaciones (metodología que se utilizó en la administración pasada para determinar el valor de los proyectos de las subastas de electricidad con base en la vigencia de cada permiso, al restar el costo nivelado de cada proyecto según su tecnología), las inversiones que se encuentran por entrar en operaciones o en construcción ascienden a 162,021 millones de dólares, lo que representa el 23% de todas las inversiones históricas para generación de electricidad con permisos en el país.
Hoy en día, entre los permisos en operación del país, que concentran el 77% de las inversiones en el país, la inversión en plantas de generación de todos los tipos es de 542,509 millones de dólares, según la CRE.
En construcción, el regulador tiene todavía un registro de inversiones por 29,796 millones de dólares, equivalente al 4.2% de las inversiones calculadas para todos los permisos de generación de energía del país.
Mientras que por iniciar operaciones los permisos registrados hasta el 2021 tienen inversiones de 132,226 millones de dólares, monto que representa el 19% del cálculo en inversión de los permisos para generación de energía otorgados por la CRE.
Únicamente en la controversial modalidad de autoabasto hay todavía 38 permisos con una capacidad de 1,340 megawatts en construcción, además de que tienen inversiones calculadas de 4,427 millones de dólares. Lo anterior, derivado de repotenciaciones de las centrales con permisos de esta modalidad en la que además hay 29 permisos con 1,696 megawatts por entrar en operaciones, con inversiones de 5,994 millones de dólares.
En tanto, sólo se tiene el registro de un permiso de productor independiente de energía (PIE) por entrar en operaciones, que pertenece a la española Iberdrola para el ciclo combinado Chocahui II cerca de Los Mochis, en Sinaloa, con una capacidad instalada de 868 megawatts e inversiones de 6,427 millones de dólares.
Con información de El Economista