Con el inicio la ronda de consultas del T-MEC solicitadas por Estados Unidos y Canadá sobre la política energética de México, no se esperan resultados favorables, de acuerdo con especialistas.
De acuerdo con Kenneth Smith Ramos, exjefe negociador del T-MEC y socio de la firma Agon, el proceso de consultas es importante para saber el posicionamiento de cada parte involucrada y llegar a un acuerdo; sin embargo, ve difícil que en este periodo de 75 días que duran se pueda llegar a un acuerdo.
“Esperemos que en las consultas pueda haber avances y no sea necesario ir a un panel, pero se antoja difícil que se solucione en esta fase de diálogo”, dijo quien fuera negociador del acuerdo en el gobierno pasado.
El especialista en tratados comerciales destacó que las declaraciones y mensajes que ha dado la Secretaría de Economía han sido positivas para llegar a un acuerdo, pero se requiere de una disposición para cambiar elementos de la ley eléctrica y de hidrocarburos para llegar a una solución favorable.
“Hay una disposición para trabajar, para negociar con Estados Unidos y Canadá, esperemos que esa disposición de dialogar se convierta en disposición de modificar elementos clave de la ley de la industria eléctrica, de la ley de hidrocarburos, las reglas de comercio exterior que han venido cerrando espacios de acción para las empresas privadas”, indicó.
Dependen de ‘voluntades’
Samantha Atayde, socia en RRH Consultores, dijo que en este periodo de consultas el resultado favorable depende de la voluntad de ambos países en la mesa de negociación.
“Todo depende de la voluntad de las partes. Las consultas son una etapa ‘precontenciosa’ que busca que las partes llegan a una solución mutuamente satisfactoria. Si hay voluntad de México para canalizar soluciones a las problemáticas que ha identificado Estados Unidos se podría trabajar y avanzar en esta etapa”, indicó.
En su opinión, si, por el contrario, México adopta una postura defensiva, la interpretación del Tratado no le asiste y fracasaría.
Juan Carlos Machorro, abogado socio de la firma Santamarina y Steta, destacó que en términos jurídicos es muy peligroso lo que está sucediendo, ya que estamos en presencia de la situación más vulnerable en relevancia del posible impacto de la economía mexicana, el evento más relevante en el tema de una controversia al amparo de un tratado comercial en la historia del país.
“Si se toman en cuenta los aspectos técnicos y legales en los diálogos de las consultas, llevamos la de perder. Muy difícilmente podremos comprobar en las consultas y etapas de panel que no hay violaciones por parte de México”, indicó.
La Secretaría de Economía aseguró que no informará detalles sobre el procedimiento de consultas, pues “son de carácter privado”.
Relación en riesgo
Por una parte, Grethel Nevárez Castro, coordinadora del Programa Global de Negocios Internacionales de la Universidad CETYS, indicó que la actitud del presidente Andrés Manuel López Obrador pone en vilo las relaciones con sus socios comerciales norteamericanos.
“Ambos países coinciden en que las políticas de México son incompatibles con sus obligaciones del acuerdo comercial, sin duda, en los próximos meses tendremos los ojos puestos sobre posibles nuevos aranceles e implicaciones en inversión extranjera”, indicó.
Por otra parte, la experta en logística internacional, Bertha Martínez Cisneros, señaló que en caso de que las disputas apunten hacia una resolución no favorable para México, podría haber un panorama “nada alentador para el sector logístico y las cadenas de suministro”.
Con información de El Financiero.