Los alimentos continuaron presionando los precios al consumidor, con lo cual la inflación presentó una magra desaceleración en la primera mitad de septiembre, de acuerdo con la información divulgada por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI).
El Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) mostró un avance quincenal de 0.41 por cineto en la primera mitad del mes patrio. Con ello, la inflación se ubicó en 8.76 por ciento anual, apenas por debajo del 8.77 por ciento de la quincena previa.
El mercado esperaba que, para este periodo, la inflación cediera más y se ubicara en un nivel de 8.71 por ciento, de acuerdo con el sondeo de Reuters.
En los últimos meses, tanto México como el resto del mundo se han tenido que enfrentar a altos niveles de inflación, lo cual ha pegado al poder adquisitivo de los hogares, sobre todo aquellos de menores en ingresos.
En México, la inflación continúa por arriba del rango objetivo del Banco de México (BANXICO) de 3% +/-1 punto porcentual, por lo que la institución presidida por Victoria Rodríguez Ceja ha endurecido su política monetaria, lo que ha llevado a que su tasa de interés se ubique, hasta el momento, en 8.50 por ciento.
En tanto, el gobierno de Andrés Manuel López Obrador prometió reforzar las medidas del Paquete Contra la Inflación y la Carestía (PACIC), el cual se presentó en mayo pasado y, de acuerdo con analistas, ha tenido un escaso impacto sobre el nivel de la inflación.
Presión subyacente
Dentro del informe del INEGI se observó que, nuevamente, aunque el alza de precios es generalizada, el mayor impacto es en la inflación Subyacente, la cual elimina de su cálculo los bienes y servicios con precios más volátiles, y la cual es tomada en cuenta por BANXICO para sus decisiones de política monetaria.
En la primera mitad de septiembre, la inflación subyacente se ubicó en 8.27 por ciento. Este dato es resultado de los incrementos en los precios de las mercancías de 10.75 por ciento en comparación anual, y en donde los alimentos, bebidas y tabaco presionan fuertemente con un encarecimiento de 13.27 por ciento.
En el caso de los servicios, se observó que estos presentaron un aumento en su precio de 5.43 por ciento.
Del lado de la inflación no Subyacente, el aumento anual fue de 10.22 por ciento. Aquí, el rubro agropecuario fue la mayor presión, con un aumento de precios de 15.23 por ciento ante los incrementos en productos pecuarios, así como de frutas y verduras.
En el caso de los energéticos y tarifas de gobierno, la inflación fue de 6.20 por ciento.
Con información de El Economista.