No obstante, estiman que el próximo año la inflación de México registrará una variación de 4.9 por ciento anual, que supera en cinco décimas la expectativa que divulgaron en junio.
Este pronóstico de la OCDE se encuentra arriba de la media de expectativas de instituciones financieras recabadas por la encuesta Citibanamex del 20 de septiembre, que anticipa inflación en niveles de 4.70 por ciento.
Para este año, los expertos de la organización estiman que la inflación registrará una variación de 7.9 por ciento, perspectiva que contrasta con 8.37 por ciento que tiene el consenso de instituciones financieras encuestadas por Citibanamex.
Inflación y respuesta monetaria
En el documento, que fue presentado en la madrugada del lunes, por el secretario de la OCDE, Mathias Cormann, hicieron un acercamiento a las economías de América Latina, para destacar que, en las más grandes, como Brasil y México, los bancos centrales ya aumentaron las tasas de interés.
Este endurecimiento de la política monetaria, combinado con una disminución de los precios de energía, puede reducir sustancialmente la inflación general en el 2023, anticiparon.
De hecho, prevén que la inflación de Brasil cerrará el año en 10.8 por ciento, una variación que incorpora un incremento de 1.1 puntos porcentuales desde 9.8 por ciento proyectado en junio.
Al corte de agosto la inflación de Brasil se encuentra en 8.8 por ciento anual, con lo que moderó la escalada ya que en julio estaba en 10.7 por ciento anual.
Mientras que la tasa de interés Brasil se encuentra en 13.75 por ciento, tras 12 incrementos consecutivos que iniciaron en marzo del 2021, cuando el rédito estaba en 2 por ciento. De hecho, fue el primero de los bancos centrales emergentes que subieron la tasa.
En tanto el Banco de México incrementó la tasa a 8.50 por ciento en agosto, en lo que fue el décimo aumento consecutivo desde 4 por ciento que estaba en abril del 2021.
Estados Unidos, el impacto
La moderación de la actividad económica de México resultará de una profunda desaceleración de Estados Unidos, para el que proyectan un avance de medio punto del PIB en el 2023, tasa que es inferior a 1.2 por ciento que estimaron hace tres meses.
Aunque no hablan en ningún momento de un riesgo de recesión para EU, sí toman las curvas de rendimiento de los activos que se han invertido para decir que es una señal que suelen asociar los mercados con una recesión económica.
De acuerdo con los economistas del organismo, los pronósticos de crecimiento para los países son a la baja ante la incertidumbre que genera la invasión de Rusia sobre Ucrania y el efecto del endurecimiento de las condiciones monetarias en la actividad económica.
El pronóstico de la OCDE es la primera actualización de los organismos internacionales para este último trimestre del año. En la segunda semana de octubre se espera el Panorama Económico Mundial (WEO) del Fondo Monetario Internacional (FMI) donde ajustan las expectativas económicas. Todavía en abril, los economistas del FMI esperaban un crecimiento de 1.2 por ciento para México en el 2023 y de 2 por ciento para este año.
Con información de El Economista.