Tijuana, B.C.-El aumento al salario mínimo que entrará en vigor el próximo año no perjudicará la competitividad de la industria en Baja California, consideró Guadalupe Sánchez Velez, directora del Colegio de Administración y Negocios, Nivel Sistema Cetys.
“Hoy en día no se puede apostar la competitividad a una mano de obra barata, más bien la competitividad debe basarse en la productividad de una mano de obra con calidad, con experiencia”, comentó.
Añadió como ejemplo que en China, país en el que se tenía la concepción de que el salario era muy barato, ahora tiene casos con mano de obra mejor pagada que en este país.
La académica indicó que los factores de competitividad hoy están más relacionados con la tecnología y la mejora de procesos.
Para 2023 el salario mínimo en la Frontera Norte pasará de 260.34 pesos diarios a 312.41 pesos, representando un sueldo mensual de 9 mil 502 pesos.
Cuando el tema aún era discutido, la iniciativa privada se pronunció en contra de que este incremento se realizara de forma inmediata.
El presidente en Tijuana de la Confederación Patronal de la República Mexicana (COPARMEX), Roberto Rosas Jiménez, enfatizó que para este aumento salarial debieron contemplarse los posibles efectos colaterales que genera en la atracción de inversiones.
“Debemos tener cuidado con el incremento, no por no quererlo pagar (…) Tijuana es maquilador y somos competitivos. No por tener sueldos bajos, sino que vamos a empezar a tener carencia de mano de obra porque una persona del centro de la república que viene a Tijuana, se enfrenta al costo en dólar”, comentó.
La directora del Colegio de Administración y Negocios añadió que el aumento al salario “es un tema polémico”, igual que el incremento del periodo vacacional.
Señaló que aunque esto sube los costos para las empresas, se debe pensar en que los más afectados por los períodos de inflación son las personas de menores ingresos.
Por lo que “aumentarles el salario es tema de retribución social, de justicia social”, finalizó.
Con información de El Sol de Tijuana.