Un superpeso no limita el comercio de México con Estados Unidos y el mundo, pero sí encarece las exportaciones manufactureras, automotrices y agroalimentarias.
“Si bien es cierto que un tipo de cambio tan fuerte hace que nuestras exportaciones sean más caras, pues el tipo de cambio está libre y de alguna forma está reflejando la mayor necesidad de Estados Unidos por comprar bienes mexicanos”, declaró Mario Correa Martínez, presidente del Comité Nacional de Estudios Económicos del Instituto Mexicano de Ejecutivo de Finanzas (IMEF).
La apreciación del tipo de cambio y un superpeso no limitará las exportaciones o comercio de México, comentó el economista.
En los últimos días, agregó, hay una apreciación del tipo de cambio sorprendente, que responde a los cambios en el entorno global más que a factores internos.
“Si ven todos los mercados accionarios, cómo empiezan el año con fuertes ganancias y esto lo que refleja es un fenómeno de optimismo de los inversionistas”, manifestó.
Agregó que los inversionistas están nuevamente saliendo a tomar posiciones de riesgo, por lo que las monedas de los mercados emergentes han estado apreciándose.
Según el Banco de México (BANXICO), el peso cerró la sesión de ayer martes con una apreciación de 0.68% o 12.8 centavos, cotizando alrededor de 18.65 pesos por dólar, con un máximo de 18.8337 y un mínimo de 18.6507 pesos, nivel no visto desde el 20 de febrero del 2020.
El peso mexicano registró una apreciación anual de 7.7%, al 10 de enero, lo que la colocó en la segunda posición de las divisas con mayores ganancias desde diciembre de 2021, de acuerdo con la Secretaría de Hacienda y Crédito Público (SHCP).
Al cerrar por debajo de 18.70 pesos por dólar, se eleva la probabilidad de que el tipo de cambio siga bajando en el corto plazo hacia el nivel clave de 18.52 pesos por dólar, en donde se ubicó el mínimo de 2020, comentó Gabriela Siller Pagaza, directora de Análisis económico de Banco Base.
“De perforar ese nivel, el tipo de cambio podría dirigirse hacia el nivel de 18.00 pesos por dólar, pero aún es poco probable”, dijo la economista.
La apreciación del peso se debe a que el mercado sigue especulando que la Reserva Federal se está acercando al fin del ciclo de incrementos a la tasa de interés y que el 1 de febrero podría subir la tasa en 25 puntos base, así como al fortalecimiento de los precios del petróleo en el mercado de materias primas, permitiendo las ganancias de varias divisas de economías emergentes y de países productores de materias primas.
El superpeso “tiene una afectación (a las exportaciones), porque nos volvemos más caros automáticamente”, comentó Luis Ernesto Rojas Ávila, director general de la Coordinación de Fomento al Comercio Exterior (COFOCE) de Guanajuato.
Las empresas adquieren una materia prima a un precio para incorporar a la línea de producción, pero merman la utilidad y ahí sirve mucho la capacidad de cada empresa para reaccionar.
El encargado de internacionalizar a las compañías guanajuatenses recordó que las pequeñas y medianas empresas le han estado preguntando por la incidencia del súper peso en las exportaciones de productos a Estados Unidos y Asia.
Con información de Forbes.