El nearshoring contribuiría a que las exportaciones de México a Estados Unidos crezcan al año en 23,000 millones al año (mdd), esto es 2% del PIB, de acuerdo con la estimación de Grupo Bursátil Mexicano (GBM).
Dicho cálculo se basa en que por cada 5% de importaciones estadounidenses de China y otros países asiáticos, México logre sustituir a China y otros países asiáticos en las importaciones estadounidenses las exportaciones del país podrían estar creciendo esos 23,000 mdd.
Regina Labardini, analista en GBM, dijo que además de este aumento en exportaciones mexicanas a Estados Unidos, entrarían 10,000 mdd al año en inversiones, esto a partir de 2023.
La delantera en el nearshoring la lleva automotriz y autopartes, por donde ya está posicionado México, recientemente se ha visto que hay espacio para crecer, le siguen los sectores de maquinaria y equipo.
“Antes el gran tema de moda que era la globalización, el tema de hoy es la regionalización y para hablar de regiones, México resulta estar parada en la mejor región posible que es Norteamérica ¿por qué? La región tiene increíbles recursos naturales, humanos y financieros, además tiene la joya de la corona que se llama: TMEC (El Tratado comercial entre México, Estados Unidos y Canadá)”, señaló en su participación en el Foro Nacional IMEF de Energía e Infraestructura.
Recordó que entre 1982 y 2022 la economía mexicana pasó de ser una exportadora de petróleo a una manufacturera en donde casi el 90% de nuestras exportaciones son de este sector.
“No sólo nos cambiamos nuestra especialización, sino que también crecimos mucho las exportaciones en este mismo periodo pasaron de ser aproximadamente de 25,000 millones de dólares anuales a casi 600,000 millones de dólares al año, entonces el tratado de libre comercio ha permitido que México se coloque como una potencia manufacturera y estar posicionado como el mejor candidato de cara a la oportunidad que se nos presenta hoy que es el nearshoring”, comentó
En la parte de los retos consideró que se clasifican dentro de 2 grandes rubros: las reglas del juego y las de infraestructura.
“Recordar que un gobierno que no hace cumplir la ley, difícilmente podemos hablar de un estado, además de esto va a ser importante que se desarrollen más y mejores políticas públicas que incentiven la inversión no solo extranjera sino doméstica”, dijo.
Indicó que va a ser importante monitorear cómo evoluciona la reciente iniciativa que se presentó ante el Congreso de reforma en materia administrativa, que entre muchas otras cosas podría cambiar ahí las reglas en cuanto a indemnizaciones y terminaciones anticipadas de contratos.
“Eso quizá compromete futuras inversiones, además en las reglas del juego también sería importante el TMEC y darle seguimiento a cómo se resuelven las distintas controversias que tenemos pendiente con Estados Unidos y Canadá, particularmente la energética”, añadió.
En el tema de infraestructura, dijo, lo energético es importante, se tiene que seguir trabajando para que la capacidad sea suficiente para cubrir la demanda sobre todo en el mediano y largo plazo.
También se debe desarrollar mejorar y desarrollar infraestructura en ciertas partes del país como puede ser el sureste, por ejemplo, ahí existe una enorme oportunidad que permitiría atender a la costa este de Estados Unidos que hoy prácticamente está desatendida, agregó.
“No sólo es una oportunidad, sino un gran reto para México, no sólo en temas de infraestructura física, sino infraestructura social, (…) más allá de los cálculos que podamos hacer diría que la magnitud de la oportunidad del nearshoring se va a definir en función de la capacidad de México para enfrentar y superar estos retos”, puntualizó.
Con información de Forbes.
