El Centro de Estudios Monetarios Latinoamericanos (CEMLA) advirtió que la Encuesta Nacional Ingreso Gasto de los Hogares (ENIGH) 2022 subestimó la relevancia de las remesas en los ingresos de las familias de menos recursos, lo que también limitó la posibilidad de medir adecuadamente su impacto en la reducción de la pobreza.
En una nota especial, titulada “Las remesas en México y las encuestas ingreso gasto de los hogares”, explicaron que la ENIGH 2022 solo capturó 8.4% del ingreso por remesas que ingresaron al país en ese año, dejando fuera 53 mil 577 millones de dólares que recibieron las familias mexicanas y que contribuyeron a elevar sus niveles de vida.
En la investigación, liderada por el responsable de la Dirección de Estadísticas Económicas y el Foro de Remesas de América Latina del Centro, Jesús Cervantes González, también mostraron su desacuerdo en la información de la ENIGH que muestra que las remesas son recibidas principalmente por los hogares de altos ingresos.
En efecto en la Encuesta 2022, levantada cada dos años por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) resaltan que 16% de las transferencias provenientes de otros países llegan al décimo decil de hogares, el de más altos ingresos; 14.4% al noveno decil y entre 11.3 y 11.5% a los hogares de los deciles ocho y siete.
“Tales resultados son absurdos e implicarían que el grueso de los mexicanos indocumentados en Estados Unidos y que son importantes remitentes de remesas son personas cuyos familiares en México se ubican en los deciles superiores de ingresos”.
En los comentarios finales del análisis, los expertos del CEMLA explicaron que las remesas que recibe México del exterior incrementan los niveles de vida de los hogares receptores y reducen la pobreza.
Enfatizaron que las remesas medidas con relación al PIB alcanzan porcentajes muy altos en las entidades federativas con menores ingresos per cápita.
“La contribución de este cuantioso ingreso cuyo destino principal es cubrir los gastos de manutención de hogares mexicanos no es captada adecuadamente por la ENIGH, por lo que su contribución es prácticamente ignorada en la medición de las desigualdades en el país y de la pobreza”.
Citan por ejemplo que en la ENIGH 2022, los ingresos provenientes de otros países solo representaron 0.35 puntos del PIB por lo que no se incluyó a 3.78 puntos del Producto que también captaron las familias receptoras el año pasado.
“Si a la base de datos de la ENIGH no se le hacen ajustes adecuados para corregir la subestimación de ingresos, incluyendo los de remesas, su utilización para mediciones de desigualdades y de pobreza produce resultados incorrectos y particularmente una fuerte sobrestimación de los niveles de pobreza”, enfatizaron.
Profundizaron subestimación
En el análisis de CEMLA establecieron que el problema de subestimación de ingreso por remesas de la ENIGH, se ha acentuado a través del tiempo.
Para ilustrarlo explican que en las correspondientes Encuestas 2006 y 2008, se capturó respectivamente 23.5% y 14.9% de ese ingreso de remesas respectivamente. Pero ese porcentaje se redujo a 8.4% en la ENIGH de 2022.
Establecen que la cifra reportada por Banco de México, de 58 mil 510 millones de dólares en el 2022, que equivalen a 4.1% del PIB “es muy sólida, ya que es un dato administrativo y no una estimación”.
Esto, al considerar que se elabora fundamentalmente a partir de registros administrativos de las instituciones intermediarias de dichas transacciones de remesas.
“México recibió del exterior 58 mil 510 millones de dólares por remesas familiares. No obstante, en la ENIGH 2022, el ingreso anual proveniente de otros países fue de solo 4 mil 932 millones de dólares, de manera que no capturó 53 mil 577 millones que seguramente elevaron los niveles de vida de millones de hogares receptores”.
INEGI consciente de subestimación
En la nota de CEMLA, expusieron que “el INEGI es consciente de que la ENIGH subestima de manera importante los ingresos y gastos de los hogares”.
Por esta razón, en los años recientes ha realizado un importante esfuerzo para mejorar la capacidad de dicha encuesta para capturar los ingresos y gastos de los hogares, dedicando mucho cuidado a su proceso de levantamiento e incrementando el tamaño de la muestra”.
De hecho, citan al INEGI al enfatizar que “el tamaño de la muestra de la ENIGH aumentó de manera importante al pasar el número de viviendas encuestadas de 20,000 en 2014 a 81 mil 515 viviendas en el 2016; 105 mil 483 hogares en el 2020 y 105 mil 525 viviendas visitadas en el 2022”.
No obstante, los expertos del CEMLA destacaron que las cifras presentadas evidencia que no ha disminuido esta subestimación de los ingresos y gastos de los hogares y el escenario es aún más grave en el caso de las remesas.
Esto podría indicar que “en México hay mucha resistencia de las personas y hogares a informar sus ingresos, ya sea por razones de seguridad o porque no es fácil calcularlos, particularmente considerando que más de la mitad de la población ocupada labora en la economía informal, obteniendo ingresos que tienen mucha variabilidad a través del tiempo”.
En el 2022 las remesas fueron equivalentes a 4.13 puntos porcentuales del PIB del país, y esos recursos los recibieron solo 13.6% de los hogares, estimó Jesús Cervantes González en un análisis realizado el año pasado.
Con información de El Economista.