El nearshoring puede ayudar a México a aumentar sus exportaciones a Estados Unidos en los próximos años, de acuerdo con el economista en jefe de Bank of America (BofA) para México.
“En la medida en que México siga ganando terreno en las importaciones de Estados Unidos, como lo ha venido haciendo, se puede ver que México podría aumentar sus exportaciones hasta 10 puntos más del PIB de lo que hoy exporta en los próximos años”, dijo Carlos Capistrán.
En 2023, las importaciones desde México alcanzaron los 475 mil 600 millones de dólares (mdd), superando los 427 mil 200 mdd de compras a China. El año pasado el déficit de bienes de EU con México aumentó a 152 mil 400 mdd, mientras que con China disminuyó a 279 mil 400 mdd, de acuerdo con información del Departamento de Comercio estadounidense.
Es importante no perder de vista que las inversiones que lleguen al país por el nearshoring no darán frutos en el corto plazo, sino a lo largo de los años, desde el anuncio hasta que se echen a andar los proyectos, subrayó Capistrán.
Inversión en año electoral
A pesar de la oportunidad que trae para México el proceso de relocalización de la cadenas de suministro en Norteamérica, este año es posible que la inversión en el país no sea tan dinámica.
Independientemente de quien gane la elección presidencial en Estados Unidos, se prevé que la tendencia del nearshoring continuará, pues las últimas dos administraciones federales en el vecino del norte -una republicana y una demócrata- han mantenido la estrategia de guerra comercial con China.
Sin embargo, hablando de la parte doméstica, el proceso el electoral y el resultado de la elección pueden frenar los anuncios de inversión, hasta tener un panorama más claro de las políticas del próximo gobierno.
La gente que está queriendo invertir en fábricas puede que prefiera esperarse unos meses, hacia finales de 2024 o inicios de 2025, “con más información para los siguientes años”, sostuvo Carlos Capistrán.
La inversión fija bruta en México ha llegado a ser una cuarta parte del producto interno bruto (35%), impulsada por las obras del gobierno federal, como el Tren Maya y el Corredor Transístmico. También ha habido inversión inmobiliaria, sobre todo lo que tiene que ver con construcción de naves industriales.
“Debemos esperar que en los siguientes años, la inversión extranjera directa empiece a crecer. Será el fruto de los anuncios de inversión”, anticipó el directivo de BofA.
Tipo de cambio
El tipo de cambio también es un factor que puede afectar las inversiones en México.
La estimación de BofA es que el peso termine el año alrededor de 18.50 pesos por dólar, y 19.50 para el próximo año.
En un escenario en el que se esperan recortes en las tasas de interés tanto de México como de Estados Unidos, el tipo de cambio será volátil en los próximos meses.
“Entonces, (si los inversionistas) se esperan un poco, podrán llegar con un tipo de cambio mejor”, concluyó Capistrán al adelantar que en 2025 se pueden ver más anuncios de inversión en México.
Con información de Revista Expansión.